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La ciencia de punta de hoy busca cruzar disciplinas, entrevista a Emilio Kropp y Ana Amador

imagen La ciencia de punta de hoy busca cruzar disciplinas, entrevista a Emilio Kropp y Ana Amador

Emilio Kropff y Ana Amador. Foto: CONICET Fotografía.

Compartimos entrevista a Emilio Kropff y a Ana Amador, con motivos del encuentro de Bioinformática y Biología Computacional que se desarrolla en Buenos Aires. Los investigadores reconocieron la relevancia que tiene para la Ciencia el trabajo interdisciplinario, y destacaron la modalidad implementada en la FCEN con su Ciclo Básico de Conocimientos Generales, en el que el trayecto inicial de las carreras es abordado desde una perspectiva integradora y abarcativa.

¿Qué importancia tienen la bioinformática y la biología computacional en las investigaciones?

Emilio Kropff: Es importante que en la región se profundicen los trabajos en estas disciplinas, biología y computación, biología y física. Estas investigaciones [interdisciplinarias] en muchos países se dan de manera muy natural. Incluso existen revistas especializadas como PLOS Computational Biology, que se dedican sólo a ese tipo de trabajos.

Ana Amador: A veces no es tan frecuente que en institutos de investigación, por ejemplo en biología, ingrese un físico o un matemático, o viceversa. Pero también hay que fomentar que en instituciones educacionales haya doctorados interdisciplinarios.

EK: Hay algunos casos muy buenos, por ejemplo en Mendoza hay un ciclo básico común en ciencias donde físicos y químicos estudian todos juntos y encaran las materias iniciales desde un punto de vista abarcativo. Se busca, creo, que no haya tantos límites entre biología, física y química. Hoy la ciencia de punta busca cruzar disciplinas y si uno se queda enfrascado simplemente va a quedarse estancado.

 

En su opinión, ¿qué le aportan la física y las matemáticas a la biología, y qué le aporta esta última a las dos primeras?

EK: A mí la carrera de Física me formó conceptualmente y me dio un montón de herramientas relacionadas con generar modelos matemáticos del mundo y de lo que uno ve, para poder sacar conclusiones e ir a testearlas en un terreno experimental.

AA: El físico aprende a simplificar una realidad muy compleja para poder hacer un modelo, a reducir la complejidad en ecuaciones – por decir algo – que en general tienen pocas variables y seguro muchas menos que las infinitas que podría tener un sistema complejo. Y en esa reducción está el arte del físico, en decidir con qué quedarse y con qué no.

EK: Desde la física eso se puede hacer, hay leyes fundamentales y herramientas matemáticas para hacerlo. En Biología es más raro, primero porque [ese reduccionismo] no es el enfoque tradicional de las biologías, es más descriptivo porque no hay leyes fundamentales. El ‘que tiro y que no’ no es para nada obvio en la biología.

 

¿Qué trabajos de modelado se pueden hacer desde la física para problemas que se plantean desde las biologías?

AA: En mi experiencia hacer modelados y trabajar en modelos más sencillos te guía para saber que tipo de experimentos hacer y que cosas mirar de esos experimentos. A veces uno hace las cosas y se pierde resultados, por ejemplo un código neuronal. Medís los ‘disparos’ de las neuronas, pero si no tenés un modelo que te ordene y te indique ‘mirá por acá’ es difícil ver dónde hay que enfocarse en el mar de los resultados. Es como una lupa, y ahí muchas veces encontrás respuestas más claras. Es como tener un gran bosque y que te señalen el camino.

EK: La neurobiología y las neurociencias me dieron las preguntas que me fascinan, que en el mundo de la física no las encontré. La física es un terreno mucho más explorado, se dedica más a encontrar los detalles de cosas que se conocen, las comprobaciones. En cambio una pregunta como la del cerebro humano es un área oscura, desconocida, es un universo completamente nuevo y está lleno de preguntas mucho más fundamentales.

 

En sus campos de trabajo, ¿qué otro componente no está integrado pero que a futuro sería interesante incorporar, además de la biología, la física y la matemática?

EK: Quizás el área de la sociología, pasar de la comprensión del cerebro a la comprensión de grupos sociales. Todo eso es algo que no se puede hacer porque la complejidad del cerebro es suficiente, pero quizás a futuro empiecen a incorporarse esos saberes. Actualmente son muchas las disciplinas que están participando en las neurociencias: hay médicos, hay ingenieros, y hay más tecnologías nuevas que tienen que ver con la ingeniería y la física. No va tanto por lo computacional, que es lo que hacemos nosotros, sino más bien desde el punto de vista de mezclar avances en la genética con avances tecnológicos para tener mejores lecturas de lo que está pasando en el cerebro.

AA: También me parece importante trabajar con ingenieros, que investigan en líneas relacionadas, por ejemplo, con temas de óptica para poder ver lo que pasa en el cerebro. E incorporar especialistas en psicología de la conducta y ciencias relacionadas, que brindan una comprensión de los fenómenos que ocurren.

Fuente: Divulgación Científica, CONICET.

 

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